Supongo que Ud se encuentra bajo seguimiento y tratamiento de un especialista de digestivo y de su médico de cabecera.
¿No le han hablado del colon irritable? Pues, a continuación, le expongo alguna información de este problema.
Es un trastorno funcional de origen motor, predomina en mujeres a partir de la segunda y tercera década de vida.
Sus manifestaciones suelen ser dolores abdominales, diarrea alternada con estreñimiento y meteorismo (gases, flatulencia).
Tiene intima vinculación con la práctica de dietas inapropiadas o mala alimentación. Sus causas son:
Errores alimentarios groseros
Psiquis especial del individuo,
Consumo excesivo de café,
Consumo de comidas rápidas (fast food) y exceso de hidratos de carbono (pizza, tacos, empanadas, sandwichs, etc. ),
Ingestas apresuradas,
Comida diaria única y excesiva (no respetar el orden de las comidas
Ingesta exagerada de picantes o frituras.
En otro post le he incluido consejos dietéticos para que mejore.
Su diagnóstico se lleva a cabo mediante un estudio completo del paciente.
En su tratamiento, además de respetar un régimen alimentario, suele ser adecuado visitar a un psicólogo conductual.
Hasta hoy, no se conoce ningún mecanismo único que explique por qué los pacientes con colon irritable sufren de forma crónica y recidivante. Desde un punto de vista general, lo más aceptado y demostrado es que existen alteraciones de la motilidad y/o de la sensibilidad digestiva, influenciadas por factores psicológicos. Además, se han propuesto otras diferentes alteraciones que también podrían influir en esta enfermedad: gastroenteritis, intolerancias alimentarias, alteraciones hormonales y factores genéticos.
Es más frecuente en pacientes con otras patologías digestivas funcionales (sobre todo dispepsia -molestias inespecíficas de estómago- no ulcerosa), en mujeres con alteraciones ginecológicas (dismenorrea) y en pacientes con enfermedades psiquiátricas (bulimia, depresión).
Los síntomas digestivos propios son el dolor y la distensión abdominales, y la alteración del ritmo intestinal.
- El dolor abdominal suele ser difuso o localizado en hemiabdomen inferior, habitualmente no irradiado, de tipo cólico, opresivo o punzante, en general leve o de moderado intensidad, con una duración inferior a las dos horas, que alivia tras la defecación y que suele respetar el sueño. El inicio o la presencia del dolor abdominal se asocia habitualmente con deseos de defecar o con cambios en la frecuencia o consistencia de las deposiciones y frecuentemente, el paciente relaciona su comienzo con la ingesta de algún alimento.
- Las alteraciones del ritmo intestinal pueden manifestarse con predominio del estreñimiento o de la diarrea, o de forma alterna diarrea-estreñimiento. La distensión abdominal y el meteorismo se desarrollan progresivamente a lo largo del día y son referidas como "exceso de gases". Son frecuentes la saciedad precoz tras la ingesta, las nauseas, los vómitos y el ardor torácico (pirosis). Otros síntomas son la sensación de evacuación incompleta y la presencia de moco en las deposiciones.
El diagnóstico se hace mediante sospecha clínica y a través de pruebas complementarias de exclusión. Quizás lo único que le falte a Ud (para concluir el estudio) sea una colonosigmoidoscopia. Supongo que ya le han realizado ecografía abdominal.
Abundando en el tratamiento, es preciso proporcionar al paciente una información adecuada y comprensible sobre las características de su enfermedad, especialmente de su cronicidad y del pronóstico benigno de la misma (algo que quizás no sea haga como se debiera en el sistema público de salud por todos los médicos). Establecer una buena relación paciente-médico favorecerá la evolución y disminuirá el número de consultas. No hay que minusvalorar las molestias del paciente, ya que sus síntomas son reales.
Una vez que el paciente haya entendido su enfermedad y haya podido resolver todas sus dudas, se pueden iniciar diversos tratamientos dependiendo de la naturaleza e intensidad de los síntomas.
Las posibilidades actualmente disponibles incluyen:
- Medidas higiénico-dietéticas (ya le he comentado y señalado en otro post): evitar temporalmente aquellos alimentos y bebidas que desencadenen o empeoren sus síntomas (tóxicos como el tabaco, estimulantes como el alcohol y el café, los que produzcan gases en exceso, etc.). Aconsejar la realización de ejercicio físico adecuado a su edad y evitar el sedentarismo. Si predomina el estreñimiento habrá que aconsejar el aumento en la ingesta de fibra (frutas, verduras, cereales, ensaladas,...)
- Fármacos: sólo cuando la intensidad de los síntomas así lo aconseje, dirigidos a controlar el síntoma predominante y durante un periodo limitado de tiempo. Pueden ser inhibidores de los espasmos (espasmolíticos), estimulantes de la motilidad (procinéticos), antidiarreicos, laxantes, antidepresivos y ansiolíticos.
- Otras: psicoterapia, acupuntura e hipnoterapia.