Recuerda el silencio es el vientre de donde nacen los sabios. Si deseas adquirir sabiduría, vuelve a nacer en medio del silencio. Solo así encontrarás tu razón de ser, la razón por la cual haz nacido.
Siéntate cómodamente, observa a tu alrededor, no juzgues, detente en tu afán, observa de nuevo, comprende que tu vida es un tesoro,
deja tus preocupaciones a un lado. No hay necesidad de llevar un equipaje pasado, ya tu corazón tiene lo que necesitas en este viaje maravilloso que es tu vida.
Deja el temor y permite que el silencio te posea,
El destino es recorrerlo. La felicidad esta en el. Camino. No hay otro secreto para ser felices.
Se sentaron con las piernas cruzadas durante horas, concentrándose en el distante horizonte, ansiosos de que la oscuridad los envolviera. Uno de ellos sin querer observó: El segundo respondió: El tercer hombre suspiró y luego alardeó: Un cantante de rap ha puesto al día algunos de los consejos dados por el libro de Eclesiastés: Hay tiempo para hablar y tiempo para callar. El silencio puede ser bueno, pero nunca si es el resultado de puro temor o falta de fibra moral. Hay momentos en que el silencio es oro, en otras ocasiones es solo dorado. Eclesiastés 3:1,7
De acuerdo a una antigua fábula, tres hombres en una ocasión decidieron entrar en la práctica religiosa de absoluto silencio. Ellos, de forma mutua, acordaron mantener un día de silencio, desde el amanecer hasta la medianoche, momento en que se esperaba la aparición en el horizonte de la luna llena.
-Es difícil no decir nada en absoluto.
-Silencio. ¡Estás hablando durante el tiempo de silencio!
- ¡Ahora yo soy el único que no he hablado!
Hay tiempo para tener hambre y tiempo para ir al centro de la ciudad.
Hay tiempo de conversar y tiempo de caminar.
Hay tiempo para ser meloso y tiempo para no ser miedoso.
Hay tiempo señalado para todo… tiempo de callar y tiempo de hablar.
A bella y breve significación subyacente en tu texto insinúa la necesaria influencia de la búsqueda del silencio, de la soledad como una forma de hallar una conciliación interior cuando se experimentan sentimientos nostálgicos que llenan de compulsión el ánimo.
El rostro de voz
Tengo una soledad
tan concurrida
tan llena de nostalgias
y de rostros de vos
de adioses hace tiempo
y besos bienvenidos
de primeras de cambio
y de último vagón.
Tengo una soledad
tan concurrida
que puedo organizarla
como una procesión
por colores
tamaños
y promesas
por época
por tacto y por sabor.
Sin un temblor de más,
me abrazo a tus ausencias
que asisten y me asisten
con mi rostro de vos.
Estoy lleno de sombras
de noches y deseos
de risas y de alguna maldición
Mis huéspedes concurren,
concurren como sueños
con sus rencores nuevos
su falta de candor.
Yo les pongo una escoba
tras la puerta
porque quiero estar solo
con mi rostro de vos.
Pero el rostro de vos
mira a otra parte
con sus ojos de amor
que ya no aman
como víveres
que buscan a su hambre
miran y miran
y apagan la jornada.
Las paredes se van
queda la noche
las nostalgias se van,
no queda nada.
Ya mi rostro de vos
cierra los ojos.
Y es una soledad
tan desolada.
MARIO BENEDETTI
URUGUAY