Quizás en algunas cosas de la vida ser el primero es bueno, por ejemplo, ser el primer amor de una persona, ser el primero en llegar a la meta en una competencia, pero para otras no basta con ser el primero , pues tambien cuenta y pesa mas ser el mejor. Constamente vivimos la vida como una especie de carrera, animamos a nuestros hijos a sacar las mejores notas que sus compañeros, a ganar en las competencias. Fomentamos constantemente la competividad pero ¿Es tan importante ser siempre el primero?